
No entiendo como podés estar quieto cuando hay cosas que nacen desesperadas por bailar.
No entiendo cómo la vida no te hizo aprender.
No logro entender cómo podés tirar algo que tanto te cuida.
Qué importa lo que pensas?
Realmente ya no me importa.
Sufrir ya no me da lo mismo, y hoy estoy segura de cómo estoy.
Segura de quién soy.
Me puedo mirar al espejo y desafiar lo que tanto temo y sonreír, y desear lo real, o hacer real lo que deseo. Es igual. Hoy todo es parte del mismo conjunto de cosas.
Sin embargo de reojo te miro. Inmóvil. Siempre quieto.
Te invite a avanzar... a recorrer conmigo el camino.
Ahora te veo a lo lejos siempre ahí. Parado, con miedo.
Que pena..
Segura, sé que en algún lado está eso que tanto espero...
amor.
3 comentarios:
tati, todavía espero un posteo =)
sme encanto tu blog,
y tmb esto ke escribiste...me gusta como escribis :)
ahroa te agrego a los links :)
y depeus leo mas entradas de antes
suetre!
Che estas escribiendo muy bien nena! Realmente debo admitir mi grata sorpresa!
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